PERUANA VACUNADA EN TIERRAS CHILENAS

Mujer de 43 años que tiene limitaciones para caminar, recibió la vacuna contra la Covid-19 el 10 de marzo del presente año en un país ajeno al de ella.

Jacqueline Mabel Olivares Gil, es una mujer peruana que padece de poliomielitis. Le detectaron esta enfermedad al primer año de vida y los doctores dijeron que posiblemente, quedaría en estado vegetal ya que todo su cuerpo menos el cerebro, estaba afectado.

Desde hace 22 años, está fuera de su añorado Sausal, más conocido como “Tierra del eterno Sol”. Localidad que pertenece al distrito de Chicama, Provincia Ascope y región La Libertad, es aquí donde pasó mayor parte de su infancia y juventud, hasta que decidió ir de vacaciones al extranjero.

Ella, actualmente reside en Santiago, la capital de Chile. Al principio, cuando llegó a tierras mapochas, tenía temor a ser discriminada por la enfermedad que padece. Grande fue su sorpresa al darse cuenta que la gente era muy amable con ella, caso contrario a su país. Y, fue en tierras chilenas que conoció al padre de su hija, María José.

No pensaba quedarse a radicar en dicho país. Solo estaba de paseo junto a su madre visitando a sus hermanos. Estando allá, uno ellos, la animó para que se quedara y cuidara a sus hijos pequeños. Luego de trabajar para su hermano, se independizó.

Jacqueline, laboraba como ama de casa, pero debido a la pandemia por la Covid-19, tuvo que implementar un pequeño taller de costura en su casa, ya que ella es una persona vulnerable y siente temor de poder contagiarse, más ahora que los hospitales están colapsados porque se han presentado dos variantes del virus: la de Brasil y Reino unido que son las más contagiosas.

Como ella ya tiene ciudadanía chilena, ha podido recibir las dos dosis de la vacuna y comenta que ya son 7 mil personas que han sido vacunadas. Pero antes de que recibiera las dosis, una persona cercana a ella, se contagió de Covid-19. Se trata de la hija de una amiga, quien fue a visitar a su madre. Jacqueline, no podía creer la noticia, entro en una crisis nerviosa y no paraba de llorar, resulta que su amiga, madre de la joven que presentaba síntomas de Covid, había ido a visitarla horas más tarde que terminó la visita de su hija. Por suerte, Olivares, no presentaba síntomas, pero para descartar un posible contagio, fue realizarse una prueba de antígeno, los resultados de esta, fueron negativos.

Al día de hoy, Jacqueline, ya no está tan atemorizada, pero es consiente que debe seguir respetando los protocolos de protección que han predispuesto la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el estado chileno. Solo está a la espera que lleguen más dosis para que su hija, María José, pueda también estar vacunada.

Por: Carlos Gil Monzón