UN WAKAPIEDRAZO PARA EL COVID

Resistiendo los tiempos difíciles de la pandemia

La empresaria cajamarquina Norma Rabanal, dueña del restaurant campestre Wakapiedra, ubicado en la campiña de moche, cuenta muchas reservaciones, sobresaltando siempre una buena atención al público con los platos criollos, sobre todo con el platillo representativo del restaurante, los famosos Wakapiedrazo 1 y 2, que son deliciosos e indudables de no pedir en la carta, es el plato bandera de la casa y la representación del este hermoso lugar.

Ya son 13 años de su fundación, siempre conquistando los fines de semana el paladar de los mocheros con ricos platos, pero desde que empezó la crisis sanitaria, Norma, cerró las puertas de su hermoso restaurant campestre, hasta que pase la pandemia, para después de un año, poder reabrirlo. Ella nos comenta que hubo demasiadas pérdidas económicas y de la flora y fauna, por esta misma razón decidió reabrir su local, porque se veía muy afectado estando abandonado, lo más representativo del local aparte de los platos de la casa era el ecosistema. Al no haber mantenimiento, los animalitos empezaban a morir y las plantas a marchitarse.

Actualmente, se atiende solo los sábados porque los domingos hay inmovilización, esto hace que se complique preparar deliverys, ya que el personal no vive cerca. Últimamente han regresado las reservaciones pero con pocas personas y siempre acatando con el protocolo dado. Se atiende con los protocolos establecidos por el gobierno, respetando el aforo, hasta el personal se ha reducido por el bienestar de todos. Es mejor trabajar con pocas personas para poder evitar los contagios y siempre manteniendo la distancia.

Rabanal, nos comenta que espera pase pronto la pandemia para reabrir la piscina porque el público pide ello. Solo nos queda seguir cuidándonos y ser responsables, para después disfrutar de este atractivo restaurant.

POR ANGIE HOYOS CHAVEZ